En 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas designaron el 6 de febrero como el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, con el objetivo de amplificar y dirigir los esfuerzos en la eliminación de esta práctica. Durante más de diez años, el Programa Conjunto ha apoyado a las supervivientes de la mutilación genital femenina, dando prioridad a las inversiones en iniciativas dirigidas por las supervivientes, centradas en el empoderamiento, la capacidad de acción y el acceso a los servicios esenciales.